• Buscar

La inteligencia emocional y los niños

La inteligencia emocional y los niños

Los padres juegan un papel fundamental en el aprendizaje de la inteligencia emocional. La educación emocional, sobre todo en las primeras etapas, debe partir de la familia. Desde pequeños aprendemos las reacciones según lo experimentado en nuestro entorno.

Publicidad

 

Indice

 

La Inteligencia Emocional fue un término definido por los psicólogos Salovey y Mayer, de la Universidad de Yale. A pesar de esto, quien logró su difusión fue el psicólogo Daniel Goldman, autor de la definición mayoritariamente aceptada. Éste se refiere a la Inteligencia Emocional como “la capacidad de reconocer nuestros propios sentimientos, así como los ajenos, de motivarnos y de saber manejar las emociones”.

La inteligencia emocional se basa en 5 cualidades: autoconciencia, autorregulación, motivación, empatía y habilidades sociales.
 

¿Es positivo enseñar a los niños a controlar sus emociones?

Gema Theus, profesional de psicología y directora del Centro de Educación Infantil MamáOca, destaca que es positivo enseñar a los niños a controlar sus emociones si se entiende como la capacidad para adecuar la expresión emocional a la situación y a la persona indicada; pero nunca, si se hace como una represión del sentimiento. Por su parte, Natalia Sastre, psicóloga del Gabinete Sastre Reyes, opina lo siguiente: “Es positivo porque así aprenden a entender sus reacciones, cómo afectan sus comportamientos y a saber que éstos tienen consecuencias para él y para los demás. En general, desarrollar la Inteligencia Emocional aporta numerosos beneficios a nivel personal. Conlleva un mejor conocimiento de sí y aumento de la autoestima, lo que repercute en la mejora de las relaciones interpersonales en la forma de reconocer y resolver conflictos... desembocando, todo ello, en un mejor rendimiento social y personal".

Además, presenta otros beneficios como reducir los berrinches y rabietas, mejorar la empatía, aumentar la asertividad, impedir las decisiones impulsivas, mejorar la resolución de conflictos, fomentar la resiliencia y reducir las conductas autodestructivas. 

Por eso, mejora el bienestar emocional y la felicidad del niño y debe formar parte de su educación y aprendizaje. 

 

El papel de los padres

“El aprendizaje de las emociones y de la Inteligencia Emocional –afirma Natalia Sastre- no es diferente a los demás. De pequeños, el papel de los padres es importantísimo, ya que la mayoría se adquiere por modelado, por observación. En las primeras etapas de la vida del niño, con el establecimiento de los vínculos afectivos, con las muestras de cariño, el infante va explorando sentimientos, reacciones; imitando e identificando emociones y situaciones. Por ejemplo, aprende que cuando rompe algo, papá se pone serio, “está triste”.

Al principio las emociones son básicas, y cuando va ampliando su vocabulario empiezan a distinguir matices; papá no está “triste”, sino enfadado, decepcionado, etc.” Además, la psicóloga del Gabinete Sastre Reyes, hace hincapié en la importancia que tiene el que los padres tengan su propia inteligencia emocional desarrollada, puesto que van a servir de modelo de aprendizaje para sus hijos, no sólo a nivel verbal, también no verbal, comportamental... Hay que tener cuidado ya que en muchas ocasiones en el afán de los padres por hacer la vida más fácil a sus hijos, se anticipan a sus necesidades emocionales; impidiendo así que sea él quien aprenda a identificar y expresar lo que sucede.

Aspectos como la autoestima y el respeto requieren del apoyo emocional de los padres y de que éstos dediquen tiempo a sus hijos y a atender sus necesidades emocionales, no sólo físicas y de juego.

En este aspecto, Gema Theus, comparte la misma opinión que su colega. “Es fundamental enseñar a los niños a solucionar por sí mismos los problemas, de la forma más adecuada. A menudo, los padres intentan solucionar sus problemas aunque no sea necesario; no les permiten la opción de pensar y actuar por sí mismos. Es clave motivarles a que resuelvan sus problemas, que desde pequeños vayan aprendiendo a tomar decisiones, aunque se equivoquen. La práctica en la solución de problemas mejora la capacidad de resolución de éstos en el futuro”. Hay que saber reconocer los esfuerzos de los hijos por aprender, mejorar o hacer las cosas bien. Asimismo es importante el apoyo en los fracasos, aún siendo sinceros con ellos en que su trabajo no ha sido realizado correctamente.
 

Habilidades prácticas de la Inteligencia Emocional

Inteligencia Intrapersonal: habilidades internas y de autoconocimientoInteligencia Interpersonal: habilidades externas y de relación
1.  La autoconciencia o capacidad de saber qué está pasando en nuestro cuerpo y qué estamos sintiendo.1. La empatía o capacidad de entender qué están sintiendo otras personas desde su perspectiva.
2. El control emocional o capacidad de regular la manifestación de una emoción y/o modificar un estado anímico y su exteriorización.2. Las habilidades sociales que pueden ser usadas para persuadir y dirigir, negociar y resolver conflictos así como para colaborar y trabajar en equipo.
3. La capacidad de motivarse a sí mismo y a los demás. 

 

Influencia en el rendimiento escolar

Para Natalia Sastre, el niño que desarrolla su inteligencia emocional posee confianza en sus capacidades personales e intelectuales, se relaciona correctamente y es capaz de comunicar lo que quiere, piensa y siente; está motivado para explorar, para conocer cosas nuevas.

Factores, todos estos, que influyen en el rendimiento escolar. La psicóloga Gema Theus, destaca que el rendimiento escolar del estudiante depende del más fundamental de todos los conocimientos: aprender a aprender. Y enumera los siguientes objetivos a reeducar como clave fundamental:

Confianza: La sensación de controlar y dominar el propio cuerpo, la propia conducta y el propio mundo. La sensación de que tiene muchas posibilidades de éxito en lo que emprenda y que los adultos pueden ayudarle en esa tarea.

Curiosidad: La sensación de que descubrir algo es positivo y placentero.

Intencionalidad: El deseo y la capacidad de lograr algo y de actuar en consecuencia; ligado a la sensación de sentirse competente y eficaz.

Autocontrol: modular y controlar las propias acciones de una forma adecuada a su edad.

Relación: Una capacidad que se basa en el hecho de comprender a los demás y de ser comprendido por ellos.

Capacidad de comunicar: El deseo, la capacidad y la confianza de intercambiar verbalmente ideas, sentimientos y conceptos.

Cooperación: Armonizar las propias necesidades con las de los demás en las actividades grupales.
 

Puntos clave para desarrollar la Inteligencia Emocional de tus hijos

1. Deja que tus hijos tomen sus propias decisiones, siempre adecuadas a su madurez y a su nivel intelectual.

2. Motívales para que resuelvan sus problemas.

3. Reconoce y valora sus esfuerzos por hacer bien las cosas y por aprender.

4. Apóyale en sus fracasos, dale confianza en sí mismo y en sus posibilidades para que vuelva a intentarlo.

5. Atiende sus necesidades emocionales; dedica tiempo a hablar con tus hijos sobre sus sentimientos.

6. Enséñale la importancia de respetar los gustos y las opiniones de los demás.  

 

 


Fuentes: Gema Theus, psicóloga y directora de la Escuela Infantil MamáOca. Natalia Sastre, psicóloga del Gabinete Sastre Reyes.

Fecha de actualización: 02-06-2022

Redacción: Lola García-Amado

Publicidad
Publicidad

TodoPapás es una web de divulgación e información. Como tal, todos los artículos son redactados y revisados concienzudamentepero es posible que puedan contener algún error o que no recojan todos los enfoques sobre una materia. Por ello, la web nosustituye una opinión o prescripción médica. Ante cualquier duda sobre tu salud o la de tu familia es recomendable acudir a unaconsulta médica para que pueda evaluar la situación en particular y, eventualmente, prescribir el tratamiento que sea preciso.Señalar a todos los efectos legales que la información recogida en la web podría ser incompleta, errónea o incorrecta, yen ningún caso supone ninguna relación contractual ni de ninguna índole.

×