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¿A qué edad es recomendable que aprendan inglés?

¿A qué edad es recomendable que aprendan inglés?

No es ningún secreto que aprender idiomas es indispensable para labrarse un futuro mejor a nivel laboral, ampliando las oportunidades que aparecerán. Concretamente, el inglés es un idioma indispensable y que supone una gran ventaja a la hora de encontrar trabajo o de tener mayores ocasiones de ser aceptados en algunas carreras, cursos o puestos de trabajo en el extranjero.

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Índice

 

¿Cuándo deben empezar los niños a aprender inglés?

Los beneficios y ventajas de aprender otros idiomas desde pequeños son muchos. Permite comunicarse con personas que hablan otras lenguas, incluso si no hablan inglés, pero al ser un idioma universal permite una comunicación entre un español y un alemán, por ejemplo. Además, también es una ventaja a la hora de obtener información que muchas veces solo se encuentra en esta lengua, lo cual ya no supondría un problema.

De cara al futuro abre muchas puertas tanto académicas como laborales. Se puede estudiar o trabajar en el extranjero sin problema, lo cual enriquece a la persona con las experiencias vividas y, además, aporta mucho al currículum.

Por todos estos beneficios se recomienda que los niños aprendan inglés cuanto antes. Los niños son capaces de asimilar una lengua como la materna hasta los 7 años. No hay problema si aún no saben leer o escribir, como mismo hacen con el idioma propio pueden aprender otro. A partir de los 8 años, seguirán teniendo facilidad para aprender el idioma, llegando a hacerlo a niveles muy avanzados, pero no lo habrán adquirido como un segundo idioma materno. Es a partir de esta edad que la plasticidad del cerebro comienza a ralentizarse, lo que dificulta un poco más el aprendizaje.

Es importante que el aprendizaje sea innato y espontáneo para que se adquiera casi sin que se den cuenta. Antes de los 4 años los niños y las niñas son capaces de aprender un segundo idioma como si fuese otra lengua materna, incluso 3. Esto lo hacen de la misma manera que su idioma principal, se aprende poco a poco y sin que exista ningún esfuerzo.

Según un estudio del Instituto Tecnológico de Massachusetts dirigido por Joshua Hartshorne los niños pueden aprender la gramática del inglés hasta los 10 años como un nativo, a partir de esa edad y hasta los 18 siguen teniendo facilidad para aprender el idioma, pero no lo harán como si se tratara de una persona autóctona. A partir de los 18 se complica cada vez más adquirir un nivel alto del idioma.

Los investigadores concluyeron dos posibles causas de esta pérdida de facilidad para aprender inglés. La pérdida de la plasticidad neuronal y, por otro lado, la cultura. Al independizarse, comenzar unos estudios universitarios y entrar en el mundo laboral se tiene menos tiempo y energía para adquirir otros idiomas.

Ser una persona bilingüe hace trabajar partes del cerebro que no se consigue de ninguna otra manera. Por lo que mientras más joven se sea al aprender el idioma más destrezas y capacidades adquirirá el menor.
 

¿Cómo enseñar inglés a los niños?

Los padres y las madres deben fomentar este aprendizaje y hacerlo parte de su día a día para que casi sin darse cuenta adquieran una base sólida del idioma. Existen multitud de aplicaciones y páginas webs que enseñan inglés de una manera sencilla y divertida, además de que desde casa los progenitores pueden aportar su granito de arena hablando con ellos en inglés. En el caso de que no se domine mucho el idioma basta con hablar algunas palabras o hacerlo con canciones, la cuestión es que los niños comprendan que aprender un idioma es entretenido y conseguir que les guste.

Además, existen campamentos de verano en inglés o cursos de algunas semanas que introducen a los pequeños en un entorno de comunicación inglesa al completo. Asimismo, también existe la opción de las guarderías de habla inglesa. Al contrario de lo que muchos adultos pueden pensar esto no va a confundir al niño o a la niña, como ya se ha comentado lo ideal es exponerlos al idioma cuanto antes y que forme parte de su día a día.

La soltura con el idioma, la espontaneidad y la buena pronunciación es algo que se consigue con mucha más facilidad cuando se aprende desde la infancia, por ello no hay que pensar que son demasiado pequeños para algo. Los niños mientras más pequeños más facilidad tienen para adquirir conocimientos y aprendizajes.

Esta facilidad no implica que de un día para otro sean expertos angloparlantes, los progenitores deben tener mucha paciencia y dedicación. Apoyar a sus hijos para que aprendan y quieran seguir haciéndolo y nunca dejar que se desanimen. Pensar en facilitarle el futuro es una de las misiones de más importantes de los padres y, hoy en día, se puede evitar que los jóvenes tengan esa desventaja en el futuro.  


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