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Crean espermatozoides a partir de células madre extraídas de los testículos

Crean espermatozoides a partir de células madre extraídas de los testículos

La infertilidad es un problema muy grave para muchas parejas y, en el 40% de los casos, los problemas vienen del hombre, a pesar de que siempre se ha considerado a la mujer como responsable de los problemas para concebir, por lo que son menos los estudios que se han realizado acerca de la infertilidad masculina y cómo tratarla. Sin embargo, la azoospermia (ausencia de espermatozoides en las muestras de semen) es bastante habitual, por lo que todos los avances al respecto en ese campo son una buena noticia para las parejas que buscan tener un bebé.

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¿Qué es la azoospermia?

La azoospermia es un problema de fertilidad que supone la ausencia de espermatozoides al eyacular. Puede deberse a tres causas principales: problemas hormonales, dificultades en la fabricación o complicaciones en el transporte de los espermatozoides.

Asimismo, hay que saber que existen dos tipos de azoospermia: la obstructiva (que consiste en la ausencia de espermatozoides en el semen eyaculado a causa de un defecto en los túbulos seminíferos o conducto deferente que impide la salida de espermatozoides en el eyaculado, pero sí hay producción espermática en el testículo) y la secretora (más grave ya que implica un defecto en el proceso de formación de las células sexuales masculinas, es decir, no se producen espermatozoides).

Para comprobar si un hombre genera espermatozoides o no es necesario realizar una biopsia, lo cual no deja de ser un método invasivo. Por eso, la Dra. de IVI Barcelona, Marga Esbert, ha desarrollado un algoritmo que permite conocer la presencia de espermatozoides en el testículo mediante cierto factores, evitando dicha intervención. Para ello, recogió datos de todos los pacientes azoospérmicos de IVI Barcelona sometidos a biopsias testiculares entre 2004 y 2017. De una muestra total de 96 varones se analizaron diferentes parámetros tales como la edad, la duración de la esterilidad, el nivel de la hormona FSH, el índice de masa corporal, el tamaño de los testículos y el tipo de patología, y su asociación con el éxito en la biopsia.

Según comenta la Dra. Esbert, “en pacientes con azoospermia obstructiva somos capaces de recuperar espermatozoides hasta en el 100% de los casos, sin embargo, en varones con azoospermia secretora el porcentaje baja al 29%, que serían los más beneficiados si consiguiéramos un diagnóstico utilizando un método no-invasivo”. De momento no existen marcadores que hayan obtenido el consenso a nivel científico, pero este estudio de IVI ha descubierto que en función del volumen testicular se puede estimar de forma bastante fiable la presencia de espermatozoides en el testículo. Ahora están trabajando para conseguir otros tipos de marcadores.

Por otra parte, Rocío Rivera, doctora de IVI Valencia, ha estudiado las diferencias en el perfil proteico de las muestras de diferentes pacientes, comparando entre aquellos en los que, gracias a la fecundación mediante ICSI, se logró obtener un embarazo con los que fallaron para poder obtener datos que ayuden a lograr siempre el embarazo.

La Dra. Rivera afirma que “con este estudio hemos conocido y descrito el perfil proteico de las muestras, tanto las que embarazaron como las que no. Hemos comprobado que existen diferencias en cuanto a las proteínas, y que estas pueden servir como marcadores que nos permitirán separar los espermatozoides susceptibles de embarazar de los que no. Además, mediante la técnica MACS (técnica de reproducción que permite seleccionar los espermatozoides con las mejores características), se podría pensar en enriquecer una muestra con espermatozoides que contengan las proteínas más óptimas para ser utilizadas en un tratamiento de reproducción”. Un futuro muy prometedor aunque aún hay que seguir haciendo estudios.

 

Espermatogénesis humana a partir de células madre

Un equipo de investigadores chinos ha logrado desarrollar una nueva técnica que permite obtener espermátides humanos (células precursoras inmediatas de espermatozoides, capaces de fecundar un óvulo) a partir de células madre extraídas de los testículos de hombres con una azoospermia obstructiva. El estudio, publicado en la revista The Lancet, culmina el trabajo iniciado por los doctores Jan Tesarik y Carmen Mendoza en 1998, quienes iniciaron los estudios para lograr crear espermatogénesis humana completa in vitro.

Estos investigadores chinos habían publicado previamente en la revista New England Journal of Medicine un estudio en el que aseguraban que los espermátides pueden fecundar óvulos humanos, del mismo modo que los espermatozoides maduros.

Según el doctor Tesarik, “el desarrollo de un sistema de cultivo, realizado por el equipo chino, permite realizar en el laboratorio el proceso completo de espermatogénesis, desde el inicio hasta la formación de células capaces de fecundar óvulos, lo que amplía las actuales fronteras de la fertilidad masculina”.

Esta nueva técnica podría permitir a hombres con azoospermia ser padres, aunque falta por saber si las células madre necesarias para crear espermatozoides se pueden encontrar en todos los hombres con ausencia completa de espermatogénesis o no. “Si es así -concluye Tesarik- podremos hablar de una verdadera revolución en el tratamiento de infertilidad masculina. 


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