Tubérculos de Morgagni

Índice

• ¿Qué son?
• ¿Cuándo aparecen los tubérculos de Morgagni?
• ¿Cuántos tubérculos de Montgomery hay en el pezón?
• ¿Debo tener cuidado con los tubérculos de Montgomery?
• ¿Pueden ser un signo de embarazo temprano

¿Qué son?

Los tubérculos de Morgagni son las glándulas areolares y sebáceas situadas en las aréolas que rodean los pezones. Producen unas secreciones sebáceas que mantienen los pezones protegidos. Durante la gestación estas glándulas tienen un aspecto más marcado de lo normal y sobresalen; en ese momento reciben el nombre de tubérculos de Montgomery, y a muchas embarazadas pueden asustarles estos bultitos, pero es un proceso normal de las mamas que se preparan para la lactancia.

Este abultamiento se debe al aumento de los niveles de estrógenos y progesterona que estimulan el desarrollo glandular.

La función de las Glándulas de Montgomery es secretar una sustancia que lubrica y protege los pezones durante la lactancia. Asimismo, ayudan a sellar la boca del bebé para crear el vacío y facilitar la succión y emiten un olor que guía a los bebés hacia el pecho.

Algunos autores consideran que, durante el embarazo, estos tubérculos cumplen también otras funciones ya que secretan pequeñas cantidades de leche que contienen sustancias antisépticas y ayudan a mantener el pezón limpio y libre de gérmenes. También se cree que producen un olor más deseable para el bebé, por el cual prefieren la leche materna a la leche de vaca o las fórmulas infantiles.

Durante la gestación las mamas sufren muchos cambios, este es uno más de ellos. Además, la pigmentación de la piel de la aréola también se oscurece, el pezón aumenta de tamaño, la circulación de la mama aumenta y las venas superficiales se hacen más visibles…

Estos tubérculos no son una enfermedad mamaria, sino glándulas normales que muchas veces son motivo de consulta debido al desconocimiento de los mismos. Una vez finaliza la lactancia los senos vuelven a su estado anterior, incluido el tamaño de estos nódulos o bultitos.

Estas glándulas cuando se inflaman o hacen microabcesos son muy dolorosas y se debe consultar con tu médico.

¿Cuándo aparecen los tubérculos de Morgagni?

Estos tubérculos no apareen de un día para otro. Se encuentran en las aréolas y en los pezones en todo momento desde el nacimiento. Pueden variar su tamaño o grosor dependiendo del proceso en el que se encuentra la persona. Los procesos que pueden causar variaciones en los tubérculos de Morgagni son:

- El embarazo: preparan los pezones desde el primer trimestre del embarazo para la producción de leche, haciendo posible la alimentación de los bebés.

- Los cambios hormonales: protegen el pezón con sus aceites naturales.

- El estrés: al igual que ocurre con los granos de la cara, los tubérculos de Morgagni pueden notarse más con la influencia del estrés.

- La menstruación: debido a los cambios hormonales que se tiene en esta etapa.

En estos casos estos tubérculos suelen hacerse más notables a la vista y al tacto. Ten en cuenta que esos tubérculos o protuberancias no son sensibles y tampoco causan dolor. De igual forma, al momento en el que estos procesos llegan a su fin, los tubérculos vuelven a su tamaño normal.

¿Cuántos tubérculos de Montgomery hay en el pezón?

Aunque existen muchas glándulas de Montgomery, de 12 a 20 por pezón, no todas alcanzarán a ser visibles aún bajo estímulo hormonal. Normalmente, una mujer embarazada tiene visibles de 5 a 15 tubérculos de Montgomery.

El tamaño de los tubérculos de Montgomery se aprecia mejor cuando se estimula el pezón. Además, la piel que recubre las glándulas areolares está lubricada y tiende a ser más lisa que el resto de la epidermis areolar.

¿Debo tener cuidado con los tubérculos de Montgomery?

Aun cuando esos tubérculos están en estado natural, hay que mantener ciertos cuidados para no afectar a las funciones y mantener el pezón lo más protegido posible. Las medidas protectoras que se deben tomar son:

- Cambiar el sujetador: es importante cambiar de sujetador en cuanto sea notable que los senos comienzan a crecer y los tubérculos a hacerse más notable. De esta forma evitarás las irritaciones y daños en el pezón. La salud de tus senos se resiente si los oprimes, por eso es recomendable cambiar de sujetador cuando comiences a notarlo apretado.

Si estás embarazada y tienes los pezones más sensibles, es importante que utilices sujetadores naturales. Sin aros metálicos o tirantes que puedan afectarlos.

- Mantener una higiene adecuada: la zona de los suelos debe tener una gran sudoración, secreción y acné debido a las altas temperaturas y el movimiento. Es importante lavar tu pecho con un jabón en pH neutro para evitar así la alteración de glándulas mamarias y los tubérculos de Montgomery. Así no solo se mantendrá la zona limpia y libre de bacterias, sino que, además, ayudará con la eliminación del sudor, las secreciones y el acné. Además, así puedes evitar el crecimiento acelerado de los tubérculos.

- No aprietes las glándulas: cuando los tubérculos de Morgagni cuando crecen y adoptan el aspecto de un grano lleno de líquido evita apretarlas. Esto te abriría la entrada a muchas infecciones y generaría dolor y molestia.

- El uso de astringentes también está contraindicado: esto puede alterar las funciones de la glándula para producir la película protectora.

Siguiendo estos consejos evitarás cualquier daño en la zona o lograrás mantener la salud de tu pecho y pezones.

¿Pueden ser un signo de embarazo temprano?

Los tubérculos de Montgomery pueden ser un signo de embarazo precoz. Muchas mujeres afirman que la aparición de estos bultos fue uno de los primeros signos que notaron cuando supieron que estaban embarazadas. Algunas mujeres incluso notaron los tubérculos de Montgomery antes de el retraso en la menstruación, otras lo experimentas más adelante en el embarazo.

Entre los signos tempranos del embarazo te puedes encontrar:

- Amenorrea: falta del periodo menstrual

- Senos tiernos e hinchados

- Fatiga

- Antojo de alimentos

- Sangrado de implantación: normalmente de color marrón o rosado

- Micción frecuente

- Náuseas matutinas: aunque se llamen así, pueden ocurrir en cualquier momento del día