La 6ª semana de embarazo

Indice

• Desarrollo del feto en la sexta semana del embarazo
• Cambios en la madre en la semana 6 del embarazo
• ¿Cómo cuidarse en esta semana?

 

Desarrollo del feto en la sexta semana del embarazo

En esta semana el embrión ha crecido aproximadamente 6 milímetros. Si pudieras ver a través del útero, te encontrarías una cabeza enorme, manchas oscuras a los lados donde están sus ojos y las ventanas de la nariz que comienzan a tomar forma. Dos hoyos a los lados de su cabeza marcan sus oídos en crecimiento. Debajo de la apertura que más tarde será la boca de tu bebé, hay pequeños pliegues que desarrollarán su cuello y la mandíbula inferior. Dentro, la lengua y las cuerdas vocales comienzan a formarse.

El cerebro aumenta de tamaño y el corazón ya late a un ritmo de 100 a 130 pulsaciones por minuto -casi dos veces más rápido que el tuyo.

Comienzan a brotarle lo que más adelante serán sus brazos y piernas. Sus manos y pies se parecen a palas y los dedos aún no están separados unos de otros, pero pronto empezarán a distinguirse. También comienza a construir fibras de músculo y, a mitad de semana, probablemente empezará a mover sus miembros diminutos.

La circulación de la sangre también inicia su funcionamiento. En este período se diferencian los órganos genitales y se desarrollan los intestinos.

La placenta comienza a asumir sus funciones de nutrición y oxigenamiento al feto, además de eliminar sus residuos. Además, hasta la semana 14, la placenta es la encargada de segregar la hormona gonadotropina coriónica humana (hCG) y otras hormonas esenciales. También protege al feto y sirve de barrera para evitar que sustancias peligrosas lleguen al feto.
 

Cambios en la madre en la semana 6 del embarazo

Lo más común es que en esta semana comiencen los malestares propios del embarazo y que ya no los confundas con los malestares premenstruales: náuseas, mareos, cansancio, ganas de orinar, mal sabor de boca o disgeusia, olfato sensible.... Sin embargo, no todas las mujeres se sienten mal durante los primeros meses. Además, cada embarazo es distinto; si has tenido un embarazo anterior es posible que éste sea completamente diferente y que sientas cosas que en el otro no sentiste.

Comienzan los cambios de humor y es muy probable que un día te sientas malhumorado y al siguiente muy feliz. Estos cambios los provocan las hormonas y son normales en este periodo del embarazo. Pero aparte de las hormonas, tu vida está a punto de cambiar y ¿quién no se sentiría intranquilo y alegre a la vez?

Las manchas de sangre son comunes, pero a veces también son un signo de aborto espontáneo. Si las pérdidas son abundantes, acude en seguida al médico.
 

¿Cómo cuidarse en esta semana?

Continúa cuidando tu dieta y, aunque tengas antojos, procura no consumir muchos alimentos ricos en grasas saturadas y azúcares como las bolsas de snacks o la bollería industrial, ya que son calorías vacías que no aportan nutrientes y pueden hacer que engordes mucho más de lo recomendado, además de poder desarrollar diabetes gestacional.

Sigue tomando ácido fólico y yodo, evita los alimentos peligrosos, cuida bien la higiene en la cocina y no bebas nada de alcohol. Si tienes gato, no toques sus heces, usa guantes y lávate bien ya que, aunque es raro, puede transmitirte también la toxoplasmosis si se infecta en estos meses. 

Fumar también es muy perjudicial, así que intenta no fumar nada de nada, cualquier cantidad, incluso un cigarrillo, puede ser malo para el feto.

Haz ejercicio físico moderado de manera regular, te ayudará a alivia ciertas molestias y descansar mejor, así como sentirte mejor y reducir el estrés.

Lo más probable es que esta semana vayas por primera vez al ginecólogo  o profesional de medicina para que te dé las pautas a seguir y te mande los primeros análisis de sangre y orina. A veces se hace una ecografía para comprobar que el corazón del embrión late y está bien colocado.