Salud visual durante el embarazo

Indice

• El embarazo y la salud visual
• Otros problemas visuales comunes en el embarazo
• ¿Cuándo consultar al ginecólogo y al especialista óptico?
• Cuidado con las mujeres que padecen diabetes
• Recomendaciones del especialista

 

El embarazo y la salud visual

Las mujeres embarazadas presentan numerosos cambios hormonales que pueden influir en su salud visual. En el caso de mujeres diabéticas o con problemas previos de refracción (miopía, hipermetropía y astigmatismo) las medidas de prevención deben ser aún más estrictas, puesto que las posibilidades de sufrir una retinopatía aumentan.

La retinopatía es el término que engloba a todas las enfermedades no inflamatorias que afecten a la retina. Las más comunes son la retinopatía hipertensiva, una complicación de la retinosis pigmentaria y de la hipertensión arterial y la retinopatía diabética. Un diagnóstico temprano es fundamental para el tratamiento y la curación de la retinopatía. Los síntomas principales de esta enfermedad son manchas o hebras oscuras como moscas volantes, visión borrosa, zonas de visión oscura, pérdida paulatina de la visión y problemas para leer.

Para prevenir estas complicaciones, es fundamental que la embarazada desarrolle unos hábitos de vida saludables, que permanezca vigilante ante cualquier alteración que detecte en su visión y acuda al especialista óptico para que realice el examen pertinente.

“Cuando sea necesaria la prescripción de lentes de contacto, se recomienda la utilización de lentes fotocromáticas. Este tipo de lentes no solo corrigen la vista, sino que se adaptan a las diferentes condiciones de luz para mejorarla protegiendo a los ojos de los rayos UV, reduciendo el deslumbramiento, la fatiga ocular y la tensión visual”, asegura Almudena Herrero, Trade Marketing de Transitions Optical en España.
 

Otros problemas visuales comunes en el embarazo

- Aumento de las dioptrías: el aumento de la progesterona puede afectar al intercambio de líquidos que tienen lugar en la córnea, lo que unido a la retención de líquidos frecuente en la gestación o al aumento de los estrógenos que ocasionan cambios en el tamaño y curvatura de la córnea y el cristalino, pueden hacer que aparezca una leve miopía o esta aumente entre media y una dioptría. Normalmente, esta subida desparece tras el parto.

- Corionetinopatía serosa: percepción de una mancha central o de líneas torcidas al leer. Este problema aparece cuando se acumula líquido debajo de la retina, lo que puede distorsionar la visión.

- Obstrucciones de venas y arterias en la retina, provocando pérdida de visión y de agudeza visual que se recupera después del parto.

- Xeroftalmía o sequedad ocular. Los ojos secos son un problema muy habitual en la gestación, que puede además provocar sensación de punzadas, quemazón, irritación, ardor, enrojecimiento, picor, fatiga ocular, dificultad para usar lentillas o abrir el ojo al despertar, sensación de cuerpo extraño o arenilla, etc. El tratamiento más eficaz de oftalmología pasa por asegurar el aporte de lubricación e hidratación necesario mediante el uso de lágrimas artificiales.
 

¿Cuándo consultar al ginecólogo y al especialista óptico?

Es importante que toda futura mamá acuda a sus especialistas en Ginecología y Salud Visual siempre que se dé alguna de las siguientes circunstancias:

• Disminución de la visión

• Fatiga visual de forma rápida

• Disminución de la secreción lagrimal y sensación de sequedad

• Visión borrosa o doble

• Disminución de la visión lateral

• Dolores frecuentes de cabeza

• Visión de manchas en el campo visual

• Molestias a la luz

• Edema

 

Cuidado con las mujeres que padecen diabetes

Las mujeres diabéticas sufren muchos de los problemas oculares que se presentan con el embarazo. De hecho, un 30% de las mujeres que son diabéticas antes del embarazo desarrolla una retinopatía durante el mismo. Aquellas que además padecen una miopía elevada están más predispuestas a sufrir un desprendimiento de retina, por lo que es recomendable que todas ellas acudan a sus especialistas ópticos para realizarse controles periódicos.
 

Recomendaciones del especialista

La importancia de adoptar medidas de prevención y mantener un adecuado control es clave para una buena salud visual. Asimismo, conviene seguir algunas recomendaciones claves del especialista: 

• Las embarazadas que presentan disminución de su visión lejana deben tener cuidado  con actividades como la conducción, especialmente durante la noche.

• En algunos casos, se debe prescribir o cambiar la corrección óptica durante la gestación. 

• Las mujeres con prescripción óptica deben utilizar lentes de alta calidad que permitan el paso natural de la luz para que la imagen se forme de manera nítida, libre de opacidades y distorsiones. Asimismo, deben bloquear los rayos UV al 100% para adaptarse a las diferentes intensidades de luz.

• Evitar tanto la escasez de luz como los deslumbramientos. 

• Las usuarias de lentes de contacto deben mantener lubricados sus ojos.

• En caso de ser diabéticas, deben tener un contacto permanente con su oftalmólogo.

• Avisar al ginecólogo o profesional de medicina ante cualquier cambio o alteración en la visión y consultar a su oftalmólogo.