¿Cuándo debe nacer un bebé?

Cuando te quedas embarazada y vas al médico por primera vez, este calcula tu fecha probable de parto (FPP) sumando 280 días a la fecha de tu última regla, es decir, 40 semanas de gestación. Esta fecha en ocasiones se modifica un poco si se observa por medio de las ecografías que la edad gestacional del feto es un poco mayor o menor ya que esta depende del momento exacto en el que se produjo la concepción, lo cual puede haber ocurrido unos días antes o después, sobre todo si tu ciclo es muy corto o muy largo. En base a todos estos datos te darán la fecha estimada en la que nacerá tu bebé pero debes saber que es solo eso, una estimación ya que apenas el 4% de bebés nacen en el día indicado por el médico.

Pero realmente el obstetra no pretende ser adivino y saber con exactitud cuándo se va a producir el parto ya que eso es imposible, sino marcar una fecha en base a la cual saber cuándo deben realizarse todas las pruebas del embarazo, si el desarrollo del feto es el adecuado o no y saber hasta cuándo se puede dejar al bebé estar dentro del útero sin inducir el parto.

Y es que el parto se desencadena por la suma de factores biológicos sincronizados entre la madre y el bebé. El bebé es el que decide que ha llegado el momento de nacer enviando una serie de hormonas a la placenta para que comience a segregar oxitocina, la hormona encargada de provocar las contracciones uterinas. Pero no se sabe con exactitud qué desencadena que el bebé comience a segregar esas hormonas, solo se sabe que es algo que ocurre en torno a la semana 40 ya que, aunque se considera que el bebé está a término desde la semana 37, la mayoría de bebés (90%) nace entre la semana 38 y la 42. Por lo que la fecha exacta no se puede saber, pero sí una fecha muy cercana al momento real.

No obstante, aunque desde la semana 37 el bebé es considerado a término y no prematuro, entre esta semana y la 39, algunos órganos principales, como los pulmones, el cerebro y el hígado, siguen completando su desarrollo. Por eso, se desaconseja, a no ser que sea por motivos de salud, inducir o practicar una cesárea antes de la semana 39 ya que cada día que pasa el pequeño dentro, hasta la semana 40, ayuda a su desarrollo y su posterior adaptación al nuevo ambiente al nacer.

Pero tampoco es conveniente dejar al bebé más allá de la semana 42 ya que desde ese momento aumenta el riesgo de muerte fetal dentro del útero por problemas como placenta envejecida, reducción de líquido amniótico o aspiración de líquido amniótico. Por eso, si llegas a la semana 41 y no te has puesto de parto, en tu visita a los monitores fetales te indicarán una fecha para inducirte el parto ya que no se puede dejar más tiempo al pequeño dentro.

Pero mientras nada ocurra, tú te encuentres bien y el bienestar fetal sea óptimo, hay que dejar al bebé que nazca cuando quiera ya que la naturaleza es sabia y, generalmente, él sabe cuándo está listo para nacer. Eso sí, si te encuentras cansada en las últimas semanas de gestación, puedes seguir una serie de consejos para “estimular” el proceso como andar mucho, hacer ejercicios de basculación con la pelvis para que el bebé se encaje o hacer el amor, que es algo placentero que quizá tardéis tiempo en poder volver a hacer, así que aprovechad ahora y dejad que vuestro bebé elija cuándo ha llegado la hora de nacer.