Todo lo que necesitas saber sobre las vacunas

Indice

• ¿Qué son las vacunas?
• ¿Existen contraindicaciones para las vacunas?
• ¿Qué efectos secundarios son los más habituales?

¿Qué son las vacunas?

La vacunación, junto con la antibioterapia, es uno de los avances de la Medicina actual que más vidas ha salvado en los últimos siglos. Y es que las vacunas crean en nuestro organismo unos anticuerpos que nos protegen frente a enfermedades que pueden llegar a ser mortales, como la viruela -ya erradicada-, la difteria, la poliomielitis, el tétanos, el sarampión, ciertos tipos de meningitis o el virus del papiloma humano, entre otras.

Por todo ello, es muy importante para los padres saber qué vacunas hay que poner, para qué sirve cada una de ellas, o cuáles pueden ser sus efectos secundarios. Tanto para esta cuestión como para todas las relacionadas con la salud infantil, el apoyo de los profesionales sanitarios es fundamental, así como lo son las visitas periódicas recomendadas. 

La finalidad de las vacunas es fabricar anticuerpos específicos que crean una inmunidad activa frente a ciertas enfermedades potencialmente mortales. Mediante la inoculación de los gérmenes atenuados o inactivos que provocan esas enfermedades en el organismo, se compromete al sistema inmunitario a crear anticuerpos contra los mismos para que, en caso de que esos microorganismos (virus o bacterias) entren en el cuerpo, éste pueda reaccionar al momento y evite el desarrollo de la enfermedad o infección.

Para conseguir que la población esté protegida frente a estas enfermedades, cada país ha creado un calendario vacunal que consta de las vacunas principales (financiadas o no por el sistema público de cada país) y la edad a la que se debe administrar cada dosis. En España, por ejemplo, nos guiamos por el calendario de la Asociación Española de Pediatría (AEP), único para todas las comunidades desde hace unos años y actualizado según la evidencia científica actual.

Las vacunas se dividen en aquellas financiadas por el Gobierno (que son la gran mayoría) y las que no son financiadas y cada familia debe asumir, pero que son recomendables, como la del Rotavirus o el Meningococo B. Aunque el calendario se puede consultar en la web de la AEP, los padres no deben preocuparse por no conocerlo o por olvidarse de alguna vacuna, ya que las revisiones periódicas con el pediatra no solo están pensadas para controlar la evolución del crecimiento y desarrollo del niño, sino también para poner cada una de las vacunas cuando corresponda. Por eso es tan importante acudir a todas las revisiones con el pediatra durante los primeros años de vida.
 

¿Existen contraindicaciones para las vacunas?

Aunque las vacunas son seguras y deben administrarse a toda la población, algunas personas presentan ciertas contraindicaciones, que pueden ser permanentes o temporales, que pueden obligar a retrasar la administración de alguna vacuna o usar una dosis atenuada para evitar reacciones adversas graves.

Entre las contraindicaciones permanentes encontramos principalmente dos:

1- Reacción anafiláctica a una dosis previa de la vacuna o a algún componente de la misma.

2- La aparición de una encefalopatía de etiología desconocida en los 7 días siguientes a la administración de una vacuna contraindica para volver a administrar vacunas con los mismos componentes.

En cuanto a las contraindicaciones temporales, son aquellas que se producen por una situación que se da en un momento determinado de la vida, como el embarazo o un estado de inmunosupresión. Por ejemplo, durante el embarazo solo se recomienda vacunarse de la gripe y de la tosferina entre las semanas 27 y 36 para pasar los anticuerpos al bebé. Mientras que los estados de inmunodepresión o el seguimiento de algún tratamiento inmunosupresor contraindican, con algunas excepciones, las vacunas atenuadas.

¿Qué efectos secundarios son los más habituales?

Todo medicamento, incluidas las vacunas, puede causar reacciones adversas leves, moderadas o graves. La mayoría de las reacciones o efectos secundarios de las vacunas son leves y de tipo local, es decir, enrojecimiento de la zona, dolor, induración y edema, de intensidad moderada, o vesículas en los vacunados contra la varicela. Estas molestias se pueden aliviar aplicando frío en la zona o administrando un analgésico si el dolor es muy intenso. No obstante, lo normal es que se pasen en unas horas y no haga falta hacer nada.

También pueden causar reacciones sistémicas, aunque esto es menos frecuente, como fiebre, irritabilidad, dolor muscular, malestar general, cefalea o erupción cutánea. Para tratar esos síntomas se puede administrar un paracetamol o antipirético si la fiebre supera los 38º C o el niño está muy molesto. Estas reacciones también suelen durar solo unas pocas horas. De cualquier forma, ante cualquier signo de alarma excesivo, consulta con tu pediatra de confianza.

De cualquier forma, todas las vacunas aprobadas por la Agencia Europea del Medicamento son seguras, incluso las vacunas del nuevo coronavirus, por lo que no tengas miedo en ponértelas, salvan vidas.