Bebés prematuros intubados

Indice

• La intubación en bebés prematuros
• Problemas a corto plazo
• Problemas a largo plazo
• ¿Cuál es el impacto de las consecuencias para la salud?

 

La intubación en bebés prematuros

En medicina, la intubación es el método en el que se introduce un tubo en un orificio externo o interno del cuerpo. La intubación en los bebés prematuros va a requerir que el personal médico supervise de manera adecuada los niveles de CO₂ y oxígeno, los niveles de acidez de la sangre, las presiones de ventilación y otros muchos factores para asegurarse de que el bebé está recibiendo los gases apropiados en las proporciones correctas.

La ventilación neonatal es bastante compleja. De hecho, una ventilación inadecuada puede originar retinopatía del prematuro, que conduce a la ceguera infantil, lesión pulmonar, lesiones relacionadas con la privación de oxígeno, pulmones colapsados y otros problemas de salud. Prácticamente la mayoría de los recién nacidos prematuros necesitará ayuda con la respiración después del nacimiento. Además, respirar mal o dar poco oxígeno al bebé puede causar lesiones permanentes como la parálisis cerebral (CP), la encefalopatía isquémica hipóxica (HIE) o la retinopatía del prematuro (ROP).

En cuanto a la ventilación o respiración mecánica lo que debemos saber es que se trata de un procedimiento en el que un ventilador o respirador colabora temporalmente por el bebé proporcionándole el oxígeno que este necesita y que no puede lograr con su respiración normal por falta de madurez y desarrollo en su sistema pulmonar o nervioso, dos de los sistemas que más suelen verse afectados junto con el sistema renal, digestivo, inmunológico y la visión.

El mayor problema, como veíamos, es la dificultad que tiene para adaptarse al medio extrauterino debido a su inmadurez y su bajo peso, pues el mayor crecimiento del feto se experimenta en las últimas ocho semanas de embarazo. Durante las 32 primeras semanas adquieren 1/3 del peso total y es en las últimas ocho semanas cuando adquieren los 2/3 restantes. En cuanto a la maduración de los órganos fetales, sí son necesarias las últimas ocho semanas de gestación para completar la maduración de los sistemas fetales garantizando su autonomía extrauterina. Por eso, cuanto más inmaduro y pequeño es, más riesgo de enfermedad existe.

Como sabemos, en los últimos años ha aumentado el número de niños que sobreviven a los nacimientos prematuros, lo que significa que puede producirse a su vez un aumento de niños y adultos que tendrán problemas pulmonares en el futuro debido a la prematuridad. Si comparamos a los bebés prematuros con los bebés nacidos a término nos damos cuenta de que las posibilidades de desarrollar complicaciones de salud irán en aumento y, por supuesto, los problemas pulmonares serán uno de los más comunes. Los pulmones son uno de los órganos que más tarda en desarrollarse cuando el bebé está creciendo dentro del útero de su madre. Asimismo, los problemas de salud en los pulmones que puede padecer el niño porque todavía sus pulmones no están completamente desarrollados pueden ser problemas tanto a corto como a largo plazo.

Problemas a corto plazo

- Displasia broncopulmonar (DBP). La enfermedad pulmonar que afecta más a los bebés prematuros. Esta se caracteriza por una respiración rápida, dificultad respiratoria y jadeos, y tos para conseguir más oxígeno. La displasia puede ser transitoria, pero en algunos niños los síntomas pueden llegar a persistir hasta la edad adulta lo que aumenta, además, el riesgo de padecer enfermedades pulmonares crónicas como la enfermedad pulmonar obstructiva crónica.

- Síndrome de dificultad respiratoria (SDR). Este síndrome suele ser la causa principal de muerte en recién nacidos prematuros. Se produce en los bebés cuyos pulmones no están adecuadamente desarrollados y está provocado por la ausencia de una sustancia protectora llamada tensioactivo pulmonar. Esta sustancia ayuda a mantener los pulmones del bebé llenos de aire y cuando ya el bebé carece de dicha sustancia lo que necesita es recibir oxígeno a través de un tubo y un sustituto del tensioactivo pulmonar.

- Virus respiratorio sincitial (VRS). Lo cierto es que la mayoría de los bebés habrá contraído el VRS antes de cumplir los dos años. En la mayoría de los bebés nacidos a término los síntomas del virus son muy similares a los de un resfriado habitual. Los bebés nacidos a término obtienen anticuerpos a través de sus madres durante el embarazo, que es lo que le ayuda a combatir el VRS y otros virus.

El problema viene cuando el bebé es prematuro porque en ese caso lo que sucede es que no cuenta con los anticuerpos suficientes antes de nacer. Por ello, la carencia de anticuerpos unida al hecho de que sus pulmones todavía no estén desarrollados conlleva que la prematuridad sea el mayor factor de riesgo de una infección grave por el VRS.

Problemas a largo plazo

Actualmente los expertos no están seguros de los efectos a largo plazo en los bebés prematuros, porque, además, los avances médicos han conseguido que haya bebés que vivan más tiempo, sobre todo en el caso de los bebés prematuros extremos.

No obstante, sí es importante saber que al realizar algunas investigaciones en relación con el efecto de los bebés prematuros que ya están en edad escolar se ha descubierto que tienen una capacidad de hacer ejercicio inferior a la de otros niños de su edad nacidos a término, un mayor riesgo de desarrollar asma alérgico, una menor función pulmonar general y más problemas de obstrucción de las vías respiratorias.

¿Cuál es el impacto de las consecuencias para la salud?

Una vez conocemos los problemas tanto a corto como a largo plazo que se van desencadenando de los partos prematuros hemos de tener cuenta ya cómo es el impacto para la salud. Cuando un bebé nace de manera prematura, el equipo médico debe llevarle de inmediato a la Unidad de Cuidados Intensivos Neonatales (UCIN) para recibir cuidados individualizados. Cuando esto sucede, a los padres se les separa del bebé muy poco después de su nacimiento.

Probablemente se les indique también que vuelvan a casa mientras el bebé continúa en el hospital, o bien que se lo lleven para que desde allí puedan administrarle terapia con oxígeno u otro tratamiento. El problema está en que los padres del bebé prematuro tendrán que enfrentarse, en este último caso, a los costes psicológicos, económicos y sociales asociados a su vez a los problemas de salud en la vida adulta.

Finalmente, es importante tener en cuenta que los efectos del bebé prematuro van a variar mucho también de un país a otro. Se debe tener en cuenta que durante las últimas décadas la diferencia de la supervivencia entre los bebés nacidos en países con unos ingresos muy elevados y los bebés nacidos en países más pobres ha aumentado de manera drástica. Hay muchos bebés prematuros, sobre todo aquellos nacidos antes de la semana 28 de gestación, que padecen problemas de salud en la vida adulta que pueden suponer un coste social y económico importante tanto para el individuo y su familia como para la sociedad.