¿Puede un bebé recién nacido volar en avión?

Indice

• ¿Qué es la Tabla Haizea-Llevant?
• ¿Cómo se usa la tabla?

Volar en las primeras semanas de vida

Las primeras semanas con un recién nacido son las más complicadas. El bebé tiene que adaptarse el nuevo ambiente, y los papás a sus nuevas responsabilidades. La lactancia a veces causa complicaciones en estos primeros días y, además, lo normal es que el bebé mame cada poco tiempo y duerma pocas horas seguidas, lo que hace que los padres están cansados. Si a eso se une, en el caso de la mamá, tener que recuperarse de un parto que, en ocasiones, ha sido largo y doloroso, es normal que lo último que se le pase por la cabeza a esta familia sea coger un avión.

Sin embargo, a veces le bebé nace en plenas vacaciones, con un viaje al extranjero ya planeado, o los padres viven en otro país y quieren viajar en cuanto sea posible a su país de origen para ver a sus familias y que estas conozcan al bebé. O puede que el parto se haya adelantado y el bebé haya nacido cuando no se le esperaba. Todas estas situaciones pueden hacer que tengas que coger un avión con un bebé de apenas días, y no sepas si eso es conveniente o no para su salud.

En cuanto a su salud, no debes preocuparte, no hay una edad mínima para viajar en avión ni es necesario esperar un determinado tiempo siempre que el bebé esté bien de salud y no hubiera complicaciones en el parto. Por supuesto, si el bebé fue prematuro o tiene presenta alguna enfermedad, no podrá volar hasta que los médicos le den el alta y lo estimen oportuno. En el resto de los casos, puedes volar desde el momento que salgas del hospital, aunque los pediatras recomiendan esperar al menos 2 semanas para que el bebé pueda habituarse al nuevo ambiente y el viaje sea menos duro para todos. Y en el caso de vuelos de más de 10 horas, esperar al menos un mes. Pero, como decíamos, son recomendaciones, puedes volar antes si es necesario, las compañías de vuelo no lo prohíben ni exigen una edad mínima para viajar.

¿Por qué dos semanas?

Se aconseja no volar en avión con bebés de menos de dos semanas porque este es el tiempo que tarda en eliminar los restos de líquido amniótico que podía tener dentro de su oído medio. Por lo tanto, si viaja antes de este tiempo es posible que sienta más dolor al aterrizar y despegar e incluso que sufra algún daño en el oído.

Consejos para volar con un recién nacido

Eso sí, si vas a viajar en avión con tu recién nacido, es conveniente que sigas una serie de consejos para que el vuelo resulte lo más cómodo y sencillo para el bebé y para vosotros.

1- Los menores de 2 años no pagan billete de avión, por lo que no tienen asiento, pero sí tienes que pagar el seguro de viaje y sacar una tarjeta de embarque para él.

2- Durante el viaje el pequeño viajará encima de ti, sujeto con un cinturón especial.

3- Prepara una bolsa de mano en la que lleves todo lo necesario para el trayecto: pañales, toallitas, ropa de cambio, mantita o arrullo, chupete si lo usa, biberón con leche si no toma pecho, babero…

4- Aunque todos podemos sentir molestias en el oído al aterrizar y al despegar por los cambios de presión, para los bebés este dolor puede ser más intenso ya que su trompa de Eustaquio es más estrecha, por lo que resulta más fácil que se tapone, causando dolor e incomodidad. Para evitarlo, ponle al pecho para que succione o dale un chupete.

5- Intenta respetar sus horarios de comidas y sueño, aunque estéis en pleno vuelo. Así se sentirá menos desorientado e irritable.

6- Los bebés tienen mayor riesgo de sufrir deshidratación, por lo que conviene ofrecerle el pecho o el biberón más a menudo.

7- Algunas compañías tienen servicio de cuna, que se puede contratar para que el bebé viaje más cómodo y duerma mejor durante el viaje. Consulta a la tuya las opciones de que disponen para viajar con bebés.

8- La silla de paseo se puede llevar hasta la entrada misma del avión, donde los auxiliares de vuelo se encargarán de guardarlo hasta el aterrizaje, teniéndolo preparado al salir. Si usas fular o mochila portabebé, puede ser más cómodo tanto para ir hasta el aeropuerto como para el viaje.

9- Es normal que, a lo largo del viaje, el bebé llore en algún momento. No debes ponerte nerviosa ni preocuparte por los demás pasajeros, es cierto que no es agradable oír llorar a un bebé en un vuelo, pero no es culpa tuya, por lo que debes estar tranquila para que no se ponga más nervioso y calmarle de la mejor forma posible (cántale una nana, ponle al pecho para que escuche tu corazón, dale de comer, etc). Si el avión ya está en pleno vuelo, puedes también levantarte y pasear para que se calme y se duerma.